Gentecita

Colegio de Párvulos GENTECITA

Proyecto Educativo Institucional

Una Estrategia para el Cambio y la Mejora Continua

El Proyecto Educativo Institucional es un instrumento orientador de la gestión institucional. Contiene principios y objetivos de orden pedagógicos, filosóficos, políticos y técnicos que programa la acción educativa dándole carácter, sentido e integración. Tiene como finalidad el mejoramiento progresivo de los procesos de aprendizajes; en el mejoramiento de la realidad institucional; otorga una perspectiva de cambio, considerando las demandas de su entorno y contando con una visión adecuada del futuro, proyecta una estrategia de cambio.

Nuestro Proyecto está basado en las Bases Curriculares, los Programas Pedagógicos, los Mapas de Progreso para la Educación Parvularia y en nuestra modalidad Curricular High Scope. Este enfoque orienta el quehacer del establecimiento escolar, explicitando su propuesta educativa y especificando los medios que se pondrán en marcha para llevarla a cabo.

Además, el proyecto considera tanto las demandas que provienen del medio externo como las necesidades internas de toda la comunidad educativa. Este equilibrio permite responder de manera efectiva a los desafíos actuales y futuros, garantizando un desarrollo integral y pertinente para los niños y niñas.

Esta propuesta debe ser compartida por todos los miembros de la comunidad educativa, quienes deben estar dispuestos a comprometerse activamente. Su participación es clave para reforzar los logros alcanzados y generar estrategias que permitan superar las debilidades identificadas, fortaleciendo así el proceso educativo.

La conducción institucional planificada combina de manera adecuada el conocimiento y la acción, orientándose siempre por los objetivos propuestos. En este ámbito, la planificación no solo implica reconocer la realidad, diseñar el futuro y trabajar con el presente, sino también mantener un enfoque continuo y sistemático en cada etapa del proceso.

Este enfoque requiere acciones permanentes de revisión, evaluación y coevaluación, transformando la planificación en un motor constante de cambio. Así, se garantiza un quehacer pedagógico dinámico y adaptativo, en el que toda la comunidad educativa participa activamente para mejorar y evolucionar de manera conjunta.